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El pasado mes de abril se firmaron en nuestro país 15.326 hipotecas. Una cifra que se constituye como un 13 por ciento menos que el mismo periodo de 2013. El dato es significativo pues se produce después de varios meses de incrementos y subidas.

Este dato negativo ha motivado que las viviendas hipotecadas regresen a tasas negativas, tras un repunte en el mes anterior de más del 2 por ciento. Sin embargo, desde el Instituto Nacional de Estadística señalan que existen factores que explican el descenso de abril. Entre ellos, la celebración de la Semana Santa, fechas festivas que habrían incidido en la constitución de nuevas hipotecas.

En lo que respecta a las características de las hipotecas firmadas, estas destacan por los siguientes rasgos: su importe medio alcanzó los 100.000 euros, un seis por ciento más que el año anterior, mientras que el capital prestado bajó un ocho por ciento, lo que en términos absolutos constituye una cifra de 1.500 millones de euros.

Según las comunidades autónomas, en abril registraron un mayor número Andalucía, Cataluña y Madrid, con unas cifras que se sitúan entre los 2.760 de Andalucía y las 2.359 de la Comunidad de Madrid. Del lado contrario, los mayores descensos los registraron La Rioja, Navarra y Canarias.

De igual manera, los lugares en los que se llevó a cabo un mayor préstamo de capital fueron la Comunidad de Madrid, Cataluña y Andalucía, por este orden. La cifra de los mismos osciló en 320, 302 y 245 millones de euros de préstamo hipotecario.

Con respecto a la tipología sobre la que se lleva a cabo la hipoteca, en el mes de abril las hipotecas sobre fincas rústicas y urbanas fue de 23.465, un 20 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior. En este sentido, destaca el capital de los créditos hipotecarios, ya que este subió y registró una media de 159.000 euros, un 46 por ciento más que en abril de 2013.

Con respecto a esta tipología de hipotecas, también cabe destacar que el tipo de interés medio para los préstamos sobre viviendas fue de una media del 3,97 por ciento, frente al 4,32 registrado en 2013. En el caso de las fincas éste se situó en el 3,84 con un plazo medio de 21 años.

Finalmente, cabe destacar que la mayoría de las hipotecas firmadas utilizaron un tipo de interés variable, frente al fijo. Estas fueron del 93 por ciento, en contraposición del siete por ciento del tipo fijo. Nuevamente el Euríbor es el tipo de referencia más utilizado en estos casos.

Este tipo de interés es el que concentra mayor porcentaje de hipotecas a tipo variable, tanto antes de que se produzca un cambio como después. Así, tras los cambios de modificaciones, el interés medio de las hipotecas bajó cuatro décimas en el caso del tipo fijo y un punto en el variable.