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Los seguros para casa son un añadido de obligado cumplimiento si queremos evitarnos disgustos en nuestra vivienda. Pero, ¿qué suelen incluir los seguros de hogar? Por norma general, todos incluyen unas coberturas básicas que vamos a explicarte.

Son muchísimos los seguros para casa que podemos encontrar en el mercado, con una variedad de coberturas, cláusulas y condiciones casi infinita. Por eso vamos a explicarte en este artículo cuáles son las coberturas básicas, y algunas de sus nomenclaturas, para que tengas claro todos los conceptos a la hora de elegir el tuyo.

Conceptos básicos

Los dos primeros conceptos básicos son el continente y el contenido. Podrás encontrar múltiples definiciones, pero quizá esta definición tan sencilla sea la que mejor lo ilustre:

Contenido es todo aquello que, si le dieras la vuelta a tu casa, se cae. Y continente, es la estructura de la casa, a lo que das la vuelta.

De una manera más formal:

• El continente lo forman el techo, el suelo, las paredes y todos los elementos estructurales.
• Y el contenido está compuesto por todo lo que hay dentro de la vivienda, tanto los muebles como todos los objetos personales (ordenadores, ropa, joyas, etc).

A la hora de calcular el precio (lo que en un lenguaje más técnico se llama prima del seguro), estos dos conceptos son básicos, pues en función del valor del continente y el contenido a asegurar, el precio resultante será mayor o menor.

¿Y cómo se calculan estos dos valores?

El continente es el valor de construcción de la casa. Esto es, lo que costaría volver a reconstruir la casa en caso de un siniestro muy grave, como un terremoto o un incendio.

Y para conocer el valor total contenido, se debe calcular lo que costaría reponer objeto por objeto de toda la casa en caso de robo. Además, en muchos seguros, aquellos objetos que sobrepasan los 1.000€ se consideran objetos de valor, y generalmente tienen un tratamiento diferente, incluyéndolos dentro de un subapartado específico de “joyas y objetos de valor”.

Coberturas de Seguros para Casa

Una vez conocidos los dos conceptos asegurables en este tipo de seguros para casa, vamos a ver las coberturas básicas que suelen incluir. Es decir, los tipos de siniestro que, en caso de ocurrir, la compañía de seguros está obligada a subsanar.

• Incendios, explosiones y caídas de rayos.
• Daños por fenómenos atmosféricos (lluvia, nieve, inundaciones, viento…).
• Daños eléctricos como consecuencia de cortocircuitos o corrientes anormales.
• Actos de vandalismo.
• Daños por agua, siempre y cuando no se deban a falta de mantenimiento o daños ocasionados por despistes, como dejarte un grifo abierto.
• Daños por roturas (lunas, espejos, cristales, elementos sanitarios…) siempre que sean accidentales.
• Daños estéticos. Esta cobertura suele tener ciertas limitaciones, por lo que es muy recomendable estar informado a priori para conocer con exactitud el objeto de su cobertura.
• Robo, hurto o atraco en el interior de la vivienda. El caso de robo con intimidación fuera de la vivienda también suele estar cubierto, incluyendo coberturas como el uso fraudulento de la tarjeta de crédito.
• Responsabilidad civil. Esta cobertura está destinada a cubrir a los miembros del hogar frente a reclamaciones de terceros y abonar el pago de indemnizaciones. Por ejemplo, en el caso de producirle una gotera al vecino.
• Asistencia en el hogar. El típico servicio de “manitas”. A través del cuál la compañía pone a disposición del asegurado todo tipo de servicios para el hogar, aunque el siniestro no sea objeto de la póliza: fontanería, cerrajería, cristalería, etc.
• Defensa Jurídica. Desde hace un tiempo esta cobertura la suelen incluir muchos seguros del hogar, donde la aseguradora suele poner a disposición del asegurado un servicio de asistencia judicial, incluyendo un capital para cubrir gastos judiciales y fianzas.

Todas estas coberturas tendrán un límite máximo asegurado, dependiendo del cual el precio del seguro variará. Cuanto más capital cubra, más sube el precio del seguro para casa.

Estas son las coberturas típicas de un seguro para casa, pero se pueden añadir muchas más dependiendo de las necesidades. Como, por ejemplo, incluir el jardín en caso de tener una vivienda unifamiliar, o incluir los objetos de valor, tal y como ya hemos comentado.

Por último, cabe mencionar que los seguros de hogar no son obligatorios legalmente, si bien desde CCI siempre recomendamos asegurar tu vivienda. Si tienes cualquier duda siempre puedes contactar con nosotros a través del correo electrónico clientes@cci10.com, o a través del teléfono 914 44 84 31.